Aunque el partido de ayer no destac? precisamente por el buen juego y el espect?culo, s? que hubo un par de jugadores que se pueden considerar como los m?s destacados del encuentro, al menos en la parte argentina, la ganadora. Se trata, como no, de Mascherano y Sergio Romero, que durante el tiempo reglamentario y en los penaltis, respectivamente, mantuvieron vivo el sue?o albiceleste.
El ?Jefecito? realiz? un partido soberbio jugando como mediocentro defensivo, su posici?n natural, en la que seguramente es el mejor del mundo. Los holandeses sufrieron sus presiones, anticipaciones y cortes. Todo lo hac?a a la perfecci?n, robaba los balones sin cometer faltas y adem?s era un seguro en el pase. Un pulm?n para Argentina, sin el cual seguramente el partido hubiera tenido un final muy diferente.
Gracias a Mascherano al menos Argentina se la pudo jugar en los penaltis, y ah? es donde apareci? el gran Sergio Romero, un guardameta que si bien puede pasar desapercibido la mayor parte del tiempo, parece venirse arriba en los momentos m?s cruciales. Consigui? parar dos penaltis, a Vlaar y Sneijder, para hacer que los suyos volvieran a ilusionarse, 24 a?os despu?s, con ganar de nuevo una final. La venganza del 90 est? servida.