Hace bien Argentina en no fiarse ni un ?pice de la aparentemente d?bil Suiza. Cierto es que la selecci?n alpina no ha demostrado su calidad en lo que llevamos de Mundial, salvo tal vez en el ?ltimo encuentro ante Honduras. Pero Argentina no es Honduras, y esta noche tiene todas las de ganar frente a una selecci?n dependiente de su estrella Shaqiri.
Shaqiri es como Messi en Suiza, el talento, la velocidad, el jugador distinto y desequilibrante que puede cambiar el curso entero de un partido. Pero enfrente tiene al verdadero Messi, que es todo eso pero elevado al cubo, con mucha m?s experiencia y con unas ganas tremendas de conseguir algo grande con su selecci?n por fin. Est? claro que Messi piensa que este es su Mundial, y seguro que har? todo lo posible porque as? sea.
Visto lo visto en los anteriores encuentros de octavos, en este nos lo podemos esperar todo, porque el nivel de Suiza es superior al de Argelia, por ejemplo, y ayer los africanos pusieron contra las cuerdas a Alemania. M?s le vale a la albiceleste no confiarse demasiado porque podr?a llevarse una desagradable sorpresa para casa.